martes, 21 de julio de 2015

Deconstruir, reconstruir...

Pensaba ayer, mientras me relamía al tiempo que me zampaba un dulce de chocolate con merengue, que podría dejarlo todo y comer medio sano, medio con golosinas. "Entonces seguirás así, o peor", así que no quiero otra opción que no sea la de cuidarme, comer sano, mover el culo y tomarme mi salud en serio. He estado comiendo muy bien en casa pero, en cuanto salgo, las tentaciones me pueden.
Sin ir más lejos, esta noche tengo un cumpleaños y el postre cae como que me sobran 30 kilos.Ahora me voy a sentar a organizarme la semana: alimentación, estudio y ejercicio. Ya mañana otro gallo cantará.
El día de peso será el lunes, creo. Besitos.
P.D.: Bienvenida, Vero.

EDITO: los almuerzos ya están organizados.

14 comentarios:

  1. a mi solo me sirve no comer

    un beso!

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    1. Hola, hola.
      No comer no soluciona nada. Es crear otro problema al del sobrepeso,obesidad o lo que nos toque. Ya mi cuerpo ha sufrido bastante y lo que toca es mimarlo: un coche sin gasolina no camina.
      Besitos y arriba ese ánimo.

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  2. Hola curvitas!!!!
    El primer consejo que nos dió mi endocrina, que además es psicóloga de nutrición, en el curso que hice hace un par de meses es el disfrutar de lo que comemos, sea lo que sea. Que seamos concientes, lo que yo llamo no engullir los alimentos. Hizo un experimento con nosotros, nos dió a cada uno 2 bombones de Lind. El primer bombón, lo teníamos primero que oler, si si sólo olerlo. Te has parado a oler el chocolate??? Pero no el chocolate de un euro, un chocolate de los buenos. Después teníamos que lambiatlo, pasar la lengua por su superficie. Por último, nos hizo ponernos el pequeño bombón sobre la lengua y sin masticarlo, esperar a que se fuera disolviendo mientras lo disfrutábamos. No se podía masticar. Con los ojos cerrados, durante 10 minutos, la primera vez en mi vida que disfruté tanto del trocito de chocolate. Y mira que he comido chocolate en mi vida, en Suiza que viví 2 años me puse las botas, pero nunca me supo igual. Y que hicimos con el segundo bombón???? Pues literalmente tragárnoslo, sin saborearlo. Vaya pérdida, calorías pal cuerpo y encima sin disfrute!!!! Eso es exactamente lo que nos pasa cuando nos dan ataques de ansiedad y no somos conscientes de lo que nos comemos y lo peor es que no lo disfrutamos. Lo que aprendimos de ese experimento, mejor comprar chocolate (o lo que nos apetezca) de buena calidad y disfrutar de una pequeña cantidad es mucho mejor que comprarnos un chocolate corriente y comérnos la tableta entera sin casi darnos cuenta.
    Menudo rollo que te he hechado para decirte que espero que hayas disfrutado del dulce que te comiste jajajajaj
    Besitos

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    1. Gran consejo, Vero.
      Imposible disfrutar del dulce porque tenía la paranoia de que mi novio entraría por sorpresa en la panadería y que me iba a pillar "con las manos en el dulce". ¡Vaya dulce más amargo!

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  3. Jajajajaja que hermosa Vero! y que padre el experimento que te compartió, Curvi por mi experiencia yo quitaría algunas cosas, por ejemplo si pusiera lentejas quitaría las papas un día, podría comer papas un día y lentejas el otro, pero los macarrones y las papas del otro día ya no, lo menos de Carbs que puedo es mejor para mi cuerpo, pero ese es muy mi caso, habría que hacer la prueba de cómo te funciona y ya nos vas contando :D claro, mil veces mejor lo que has agregado a cualquier pasta procesada o cualquier harina ;) Besos!!!

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    1. Hola, Nanita.
      Si quito los hidratos, me caigo redonda. Tengo que tomar hidratos en el desayuno y en el almuerzo, aunque sin abusar. En mi caso, es obligatorio (o, literalmente, me caigo en redondo).
      Un abrazo.

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  4. ¡Hola Curvitas!
    Entiendo lo que dices de que no es posible hacer "medio sano/medio golosinas", y es verdad. Sin embargo, yo para evitar eso lo que hago es tener un día trampa: si me quiero comer un chocolate o un postre, no me digo: "NO, que eso no se puede"; digo: "AHORA NO, me lo como el sábado". ¿Sabes cómo te digo?
    No es negarte lo que te gusta, sino postergarlo, de modo que cuando te lo comas no te sientas culpable en absoluto, ya que has hecho tu semana bien hecha, sabiendo que pronto llegará tu preciado sábado (o día que elijas) y podrás comerte esa palmera de chocolate que tanto querías.
    Claro, el truco radica en hacer las cosas bien el resto del tiempo: si libras el sábado, no vas a desayunar palmeras, a comer pizza con patatas fritas y a cenarte una hamburguesa. Te desayunas tu palmera, con todo el gusto, y el resto del día pues comes normal.
    No sé si te ayudará, pero es mi truco del almendruco para no caer entre semana y la verdad es que me está yendo por ahora bien. :D

    ¡Mucho ánimo!
    Un abrazo. ;)

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    1. Hola, Noa.
      Mi problema es que varios días, esos en los que como algo indebido,pienso: hoy lo tomaré como mi "cheat mal" y tengo casi más días de esos que de los otros. Hoy fue mi cheat Day ;)
      Ahora, a comportarme hasta la semana próxima.
      Besitos.

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    2. A mí me pasa lo mismo Curvi!!

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    3. Ay, Pili, Pili. Si es que somos unas flojas... Toca cambiarlo ya o esto irá a peor.
      Besitos.

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  5. Hola.

    No sé si había pasado antes a saludar pero te sigo. Los menús están muy bien, por aquello de poner los carbohidratos a medio día y nunca por la noche.
    Está claro que cuando estamos solos es cuando más nos cuesta mantenernos dentro de la norma que queremos cumplir. Al igual que Noa, creo que es mejor destinar un día a darse un pequeño homenaje y disfrutarlo (como objetivo) que pasarnos la norma por el arco de triunfo. Mucho ánimo y espero ver esas cenas del menú (así te copio alguna : ). En breve publico yo las mías ; )

    Saludos

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    1. Hola, Javi.
      Pasaste en mi anterior entrada, efectivamente.
      Estoy buscando los menús que me dio la nutricionista en su día, pero se están escondiendo :D
      En cuanto los encuentre, subo ejemplos de cena.
      Saludosssss.

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  6. Entiendo que la tentación de tirar la toalla siempre esté ahí. Esto es jodido, no nos vamos a engañar. Pero cuando pienso la tinta china que he sudado para perder los primeros seis kilos anudo la bolsa de patatas fritas o dejo pasar el helado del restaurante. Desandar te rompe anímicamente.

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  7. Rafi, yo paso de tirar la toalla. A veces, cuando pesa demasiado, la dejo caer, para luego lavarla y seguir en la brega.
    Cierto es que muchas veces me dan ganas de liarme la manta en la cabeza y se me cuelan en el bolso dulces y chocolates, pero en el cómputo pesan más las cosas sanas (lástima que en la báscula no suceda igual)

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