lunes, 3 de febrero de 2014

H-A-R-T-A, día 1 de la nueva era

"Voy a cambiarlo todo: el blog, la forma de comer, (la falta de) ejercicio, las excusas… Me toca hacerme un lavado de cara. Si no lo hago, cerraré el blog, más que nada porque me parece absurdo tener que escribir que como bien una semana y luego mal tres; porque es una pérdida de tiempo y porque estoy harta de no saber qué escribir, harta de pensar que es mejor no poner dos comidas sanas de tal día acompañadas de golosinas, de seguir comprando golosinas amparándome en mil y ninguna excusas. Incluso harta de este tipo de entradas, que hasta ahora no me han llevado a ninguna parte. Es cierto lo que dice Alicia, cierto lo que dice MsQuisquilla… si me sobran treinta kilos no puedo hacer concesiones: no puedo permitirme comer cosas que no sean sanas amparándome en "tengo un cumpleaños, tengo una comunión, tengo la regla…", simple y llanamente porque ha sido justo ESO lo que me ha traído hasta aquí. Me va a tocar apretarme el cinturón. Ya les iré informando. Mañana me pesaré en ayunas para ver de dónde parto y mi día de peso oficial será el viernes (leí en una revista hace un par de días que era el mejor día para pesarse; si encuentro el link, lo pondré). Lo dicho. Toca empezar de cero (aunque cero signifique empezar con más de 100 kilos)"
Eso es lo que escribí y publiqué el 3 de febrero de 2014, hace poco más de un año. Lo recordé por la entrada de Pili, en la que pedía un tirón de orejas. Yo vivía, y creo que sigo casi igual, buscando excusas para comer cosas indebidas: la regla y los antojos, la pastilla anticonceptiva, el cumpleaños de tal o de cual, la cena con los amigos, el almuerzo con la familia… Siempre hay excusas. Siempre. Es cierto que la pastilla anticonceptiva me ha hecho engordar pero, si aparte, no me hubiera comido chocolatinas y paquetes de chips, no habría subido tanto de peso. Tengo frutos secos en casa y apenas los pruebo. Echo de menos a Alicia y a Ms Quisquilla, aunque agradezco a quienes siempre pasan por el blog y a las que dejan comentarios de ánimo; las echo de menos porque ellas no me daban la palmadita en la espalda cuando lo hacía mal, sino que hacían que me pusiera las pilas.
Si tengo que perder 30 kilos, no puedo estar una semana comiendo bien y luego comer porquerías de nuevo: hacerlo dos semanas bien y una mal no me va a sacar de donde estoy. Tengo que cambiar y tengo que hacerlo ahora, que me sobran 30 kilos, y no cuando tenga que quitarme 35 o 40, pues si sigo así, es lo que pasará.
Alicia me escribió un comentario que decía: "(…) quiero decirte que has dado un gran paso, que te has dado cuenta de lo que importante que es hacer una dieta en condiciones, que es verdad, que cuando nos sobran más de 30 kilos no podemos permitirnos ninguna licencia, solo tenemos que ceñirnos a lo que hay que comer y ya está. Cuesta, pero el cuerpo se acostumbra rápido, y de verdad que es la única manera. Lo de hacer el día bien pero cada tarde comer algo de chocolate, o después de cenar, un dulce, o salir y picar, te puedo asegurar que no vale, es imposible y echamos por tierra todo lo bueno que hayamos hecho en el día. Otra cosa es que, muy de vez en cuando (porque nos lo exija el guion), tomemos un trocito de tarta en un cumple y no pasa nada, sin remordimientos, pero eso, un trocito, comerlo despacito y disfrutándolo."
Es verdad y es lo que pienso hacer. Le he dicho a mi novio que no me deje comer golosinas, que no me invite a comer de lo suyo por educación, que no permita que coja un poco de chocolate con leche y almendras por la regla, o por la posición de la Luna, nada de excusas, nada de golosinas a diestro y siniestro sin más. Voy a ir estos días sin dinero en la cartera; si tengo dinero, es más fácil caer en la tentación (o en el minimarket de al lado del trabajo)… Me llevaré mis abonos de guagua y listo. Muerto el perro, se acabó la rabia.
Ayer fui a la dietista, pero ya no iré más: si no compras productos para adelgazar, no te prestan el servicio, pues paso. Ya pediré cita con el endocrino de la seguridad social. Encima, me pesó con ropa y eso que llevaba un pantalón vaquero pesadísimo. Hoy me pesé en casa y estoy como la de Ricky Martin. Otra vez 101 kg… ¡manos a la obra!

18 comentarios:

  1. Hola guapa, no se porqué no me salen tus actualizaciones en mi blog, pero bueno, quiero decirte que has dado un gran paso, que te has dado cuenta de lo importante que es hacer una dieta en condiciones, que es verdad, que cuando nos sobran mas de 30 kilos, no podemos permitirnos ninguna licencia, sólo tenemos que ceñirnos a lo que hay que comer ya ya esta. Cuesta, pero el cuerpo se acostumbra rápido, y de verdaad que es la unica manera. Lo de hacer el día bien pero cada tarde comer algo de chocolate, o despues de cenar un dulce, o salir y picar, te puedo asegurar que no vale, es imposible y echamos por tierra todo lo bueno que hayamos hecho en el dia. Otra cosa es que muy de vez en cuando, (porque nos lo exija el guión), tomemos un trocito de tarta en un cumple, se come y no pasa nada, sin remordimientos, pero eso, un trocito, comerlo despacito y disfrutandolo.
    Pues venga, no importa de la cifra de donde partas, solo tienes que proccurar hacerte los retos diarios y acostarte por la noche diciendo: " Hoy lo he conseguido" e ir a por el siguiente día.
    Un beso!

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  2. Pues sí, Alicia. Hoy lo he conseguido. Ahora me toca trabajar duro diariamente para poder decir cada noche lo mismo.
    Ufff,y, a todas estas, mi cumpleaños es el viernes :D

    Un abrazo, niña, y gracias por estar siempre ahí.

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  3. Hola curvitas! Me uno a ti en este de empezar ya de una vez por todas, "y dejar de hacer el tonto", yo también parto de más de 100, y me identifico totalmente con eso de que escondo en mi interior una chica delgada, bajo kilos de grasa.... aunque yo "sin agobios" (esto es más un decir que otra cosa), empiezo en 10 días!!
    Te sigo, mucho ánimo, un beso.

    www.chicamiranda.com

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    1. Te toca prepararte mentalmente, Chica Miranda, así que aprovecha estos 10 días para intentar ponerte en modo "comida sana on". Mucho ánimo y muchas gracias por pasar y comentar. Muaks.

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  4. No sabes lo q me alegra leerte con esa contundencia,sabes q puedes ahora es llevarlo a cabo y como bien te dijo Ali,esto o se hace o no,no hay un termino medio pero si lo haces bien los resultados se van a ver y cuantos mas veas mejor lo harás,osea q ya sabes quiero leerte con muy buenas noticias,besiños wapa

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    1. Señorita Quisquillosa, parece que esto marcha. Sé que va a ser duro, pero también sé que merecerá la pena, así que toca centrarse y no dejarse vencer por tentaciones. A ver cómo lo hago en tu tierra, que me voy dentro de un par de días. Ainsssss.

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  5. No te lo dejes, sigue y sigue, si te caes siete veces levante ocho, no has oido ese dicho??? Arriba arriba ese animo, si te vas dando cuenta de las cosas que vas haciendo mal ves corrigiendolas, si picas mas por la tarde, no te quedes en casa y vete a tomar un cafe en alguna cafeteria, o un paseo, ves a ver a una amiga... pero corrige tus horas criticas, no te compres chuches porque luego te arrepientes... estas en un buen mes para perder peso, quedan cuatro meses para ponerte manga corta y te da tiempo a perder 30 kilos si te lo propones en serio. Mucha suerte y mucho animo, si empezaste este blog es por algo, te diste cuenta de lo que no quieres, pues sigue!!!! Un besazo guapa!!!

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    1. ¿30 kilos en cuatro meses? No, gracias, jajaja. Eso es demasiado bestial para el organismo. El cuerpo tiene que ir perdiendo peso poco a poco. Vamos, es que si pierdo 12 kilos en ese mismo tiempo, me podría dar por satisfecha.
      Los cambios demasiado bruscos machacan el cuerpo y si no lo acompañamos con ejercicios de tonificación, me veo con una capa de piel flácida a modo de túnica.
      Un besito, Ruth, y mil gracias por los ánimos.

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  6. Vaya ! Otra que se ha decidido a coger el toro por los cuernos! dí que si! Todo p'alante, no intentes sabotearte, ya la gente se encargará de intentarlo continuamente ("por una vez no pasa nada") si pasa, y lo sabemos. Por eso si caemos nos levantamos, pero lo que hay que buscar es la forma de no caernos. Ve buscando tus trucos y estrategias para quitar de enmedio los malos momentos. Y si el viernes es tu cumpleaños, pues perfecto! Primer cumpleaños sano y ligero! Ya sabes que no necesitamos hincharnos a comer y beber para pasárnoslo bien.
    Vamos a por todas y sin dudar!

    Besitos.

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    1. De eso se trata, Hanna, lo has explicado de manera genial. Yo ya sé lo que es decir: solo hoy, un poquito más, por este trocito no pasa nada… pero sí pasa… vaya que si pasa. Precisamente por esos trocitos, por esas últimas veces, es por lo que estoy así.
      Anímate tú también, que somos más nosotras que los kilos. Besitos.

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  7. ¡Felicidades por la fuerza de voluntad de hoy! Cierto es que tienes que ponerte en serio y no se pueden poner constantemente excusas (Que es también lo que hago yo siempre)... Suerte que aquí aprendemos unas de otras y los consejos nos sirven!

    Bienvenida de nuevo y que sea para quedarte, verás como lo consigues!! ánimo guapa!!!

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    1. Gracias, mi niña.
      Lo bueno es que las ganas no se quedaron en el día de ayer. A pesar de los agobios de hoy, de las prisas, del cansancio, no se me ocurrió ni por un momento comer algo prohibido. Ojalá esto dure.
      Besitos

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  8. Olé y olé, muy bien.

    Esto de pesarse los viernes tengo que estudiarlo, me parece que es una buena idea.

    Un besote y a ver si planeas un menú rico y sano para tu cumple.

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    1. Ameliaaaaaa, pequeñita míaaaaaaa.
      No sabes la alegría que me da leerte :D
      Lo de los viernes tiene sentido: decían en el artículo que leí que, al relajarnos los fines de semana -al no tener que ir a trabajar, al tener más tiempo libre- no quemamos tantas calorías y el organismo se ralentiza, retiene más líquidos y no sé cuántas cosas más. Aparte de eso, solemos (yo ya no, jajaja) cometer más pecados culinarios, culinarios, no seas mal pensada… durante los fines de semana, de ahí que sea más "efectivo" pesarse los viernes.
      Ains, cómo me lío. Un abrazo, mi niña linda.

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    2. Bueno, pues me pesaré los viernes (si me acuerdo, que esa es otra).
      De todos modos, si lo haces bien cinco días y el fin de semana no, el lunes deberías pesar lo mismo que si lo haces mal dos días y luego cinco bien. El orden de los factores no altera el producto (o eso decían en el cole).

      Por cierto, pequeñita, lo que se dice pequeñitaaaa... no soy, ja ja ja. Ni por edad ni por volumen, ja ja ja. Soy graaaAAAAnde, ja ja ja.

      Un besote, Curvitas.

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    3. No me lleve la contraria, señorita. Si digo pequeñita, a misa va (jajaja).
      Lo del porqué de pesarse el viernes tenía varias razones, pero tengo cabeza de chorlito. A ver si encuentro el artículo y pongo el link.
      Besos, pequeña :P

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  9. No te agobies, no te exijas a ti misma metas super gordas y super grandes... Ve poco a poco. No estás intentando bajar de peso, sino cambiar hábitos y modificar estilos de vida... y eso es complicado. Claro que lo es.
    Si tienes un cumpleaños, una fiesta, algo importante en lo que hay que comer X cosa que estaba fuera de tus planes... Puedes hacerlo. Pero sabiendo que eres adulta, que tienes dos dedos de frente, que sabes afrontar los problemas (un trozo de pastel en una fiesta es un problema, qué narices xD)... Te lo comes y punto. No tienes fiestas todos los días, a que no? Pues por eso... hay que disfrutar de la vida, que luego hay muchos, muchos,muchos días y muchos momentos, en los que una está sola y triste y se pone a comer a tontas y a locas... Y amiga mía, eso NO está bien, y eso NO es una ocasión especial... El cumple de tu madre o la comunión de tu prima, sí son ocasiones especiales.
    No renuncies a los buenos momentos porque un puñado de grasas/hidratos/guarradas se pongan en tu camino... Con mesura, pero con cabeza... No hay que llevarlo todo al plano alimenticio... No vas a una fiesta a comer, vas a pasarlo bien... Pásalo bien, y si de paso, hay que picar algo... se pica sin más, y punto. (Y luego a seguir comiendo bien y haciendo ejercicio, por supuesto!!).

    Bienvenida a esta nueva era :) Sabes que somos muchas las que estamos en ello... pero se puede. Motívate mucho y quiérete mucho!

    Besitos ***

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  10. Ay, Anita. Eso es lo que me he venido diciendo desde la primera entrada hasta la penúltima: que tengo dos dedos de frente, que hoy es un cumpleaños, que si hoy celebro las notas y mañana celebro un ascenso… Lo que tengo que aprender es que la comida no es una recompensa. ¿Me ascienden? Genial, me voy de fiesta o quedo para tomar un zumito natural con mis amigos.
    Mi lección va a ser esa: la comida no es un premio. Claro que si en un momento determinado (pongamos este fin de semana) se me apetece comer pulpo a la gallega, me ponga un poco, pero lo que no haré será comer pulpo a la gallega con papas fritas y una coca cola solo porque sea una vez en la vida. Insisto: ha sido justo eso lo que me ha traído hasta aquí.
    Entiendo, y comparto, lo que dices acerca de no renunciar a los buenos momentos por la comida, pero tengo clarísimo que tampoco voy a permitir que el placer por la comida me fastidie la salud y me impida ponerme la ropa que me guste -y no solo la que me quepa.
    Un abrazo, Anita. Sé que podemos. Mil gracias por tu comentario, ánimos y consejos.

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